INTELIGENCIA EMOCIONAL.
Para toma de decisiones beneficiosas, lo inteligente es la combinación tanto de la razón como de la emoción.
Si somos una persona emocionalmente inteligente, sabremos cómo entender y
gestionar nuestras emociones y las de las personas de nuestro alrededor. Los
sentimientos, sensaciones, intuiciones con los que nos encontramos en el día a
día los podremos manejar de una manera positiva y eficiente, sabiendo
adaptarnos a cada situación, problema y adversidad con entereza, optimismo y
eficiencia.
Todos nosotros tenemos un "Botiquín Emocional", solo tenemos que aprender a utilizarlo.